Debemos llevar a un Punto Limpio los residuos

Si eres de los que quiere hacer el mantenimiento de tu coche por tu cuenta, debes saber dónde deshacerte de los residuos que generes. Tanto el aceite como el anticongelante son líquidos altamente contaminantes, que no pueden acabar en cualquier contenedor, desagüe o descampado. Lo mismo ocurre con los neumáticos, filtros, baterías o bombillas. Para todo esto están los Puntos Limpios repartidos por todo el territorio español.

Todo buen mecánico, aunque sea aficionado, debe desempeñar su trabajo cumpliendo con unos mínimos de respeto y saber hacer. No basta con cambiar el aceite o purgar el sistema de refrigeración como un profesional. También hay que responsabilizarse de los desechos para respetar el medio ambiente. Por no hablar de la multa que te puede caer si te pillan con las manos en la masa.

¿Dónde hay un Punto Limpio?

Si tiramos líquidos como el aceite o el anticongelante por el desagüe, estamos contaminando gravemente los ríos y el mares donde vayan a parar. Lo mismo ocurre si lo tiramos a un contenedor normal o a un descampado. No hay que pensar que son iguales que otros productos propios del hogar como el aceite de freír. Aunque estos también hay que reciclarlos debidamente, no se acercan ni lo más mínimo al daño que causan los fluidos de un coche o una moto.

Deshacerse de los residuos en cualquier Punto Limpio es gratuito, aunque muchas veces hay que atenerse a los horarios que tengan impuestos en el Punto Limpio en cuestión. Si quieres saber cuál es el más cercano, echa un vistazo a este listado, en el que puedes poner la comunidad autónoma y la localidad para saber cuáles tienes más cerca.

¿Qué elementos del coche hay que tirar a un Punto Limpio?

Como en cualquier casa, los coches también generan residuos como las bombillas incandescentes, halógenas o de tipo LED, componentes electrónicos o chatarra. Sobra decir que, aunque vengan de un vehículo, también hay que deshacerse de ellos adecuadamente. Pero es que, además de estos elementos, los coches generan unos contaminantes mucho más peligrosos que los que estamos acostumbrados a ver en nuestro domicilio. Estos son los siguientes:

Aceite de motor y filtro

Es el líquido más contaminante de los coches actuales. Solo son necesarios dos litros para contaminar una piscina olímpica. Es decir, solo dos litros para arruinar los 2,5 millones de litros que hacen falta para llenar una. Otra comparación interesante es que con un solo litro de aceite de motor se puede contaminar la superficie equivalente a un campo de fútbol, o lo que es lo mismo, 10.800 metros cuadrados. Lo que supondría su inutilización para cultivar o para alojar cualquier tipo de animal.

El motivo por el que el aceite de motor es tan contaminantes es por su gran cantidad de metales pesados y su lenta degradación. Cuando llega al mar puede perdurar entre 10 y 15 años flotando sobre las aguas. Pasado ese tiempo todavía se mantiene la contaminación de muchos de sus compuestos durante cientos de años. No hay que olvidar que los filtros de aceite también deben acabar en los Puntos Limpios.

Anticongelante

El anticongelante o refrigerante de motor tampoco se queda atrás es cuanto a contaminación. Aunque los inorgánicos son los más nocivos, tampoco hay que subestimar los orgánicos. También pueden contener metales pesados como cadmio, el cromo o el plomo en niveles suficientemente altos como para convertirlos en un residuo peligroso. Además contiene glicol de etileno, que es un compuesto tóxico para personas, animales y plantas.

Batería del coche

Si una batería de móvil o una simple pila son altamente contaminantes, imagina lo que puede pasar con una batería de coche. Básicamente contienen dos sustancias peligrosas: el plomo y el electrolito ácido. El primero puede ser muy tóxico para la salud de humanos y animales, porque entra en el organismo y se transporta por la corriente sanguínea acumulándose poco a poco en todos los órganos. El segundo es muy corrosivo y también tiene alto contenido de partículas de plomo.

Neumáticos

Las ruedas del coche también deben acabar en los Puntos Limpios. Es muy importante que sean reciclados, porque pueden aprovecharse para varios usos: asfaltado de carreteras, fabricación de otros suelos como las pistas de atletismo o parques infantiles y la creación de algunos materiales para la construcción de vehículos o edificios. También pueden aprovecharse para confeccionar suelas de zapatos o incluso alfombras.

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Cuando se dejan abandonados en un descampado o un vertedero los neumáticos van degradándose parcialmente perdiendo poco a poco las propiedades necesarias para su aprovechamiento. Además cuando se dejan en zonas no específicas para ello puede causar una gran contaminación ambiental.

Si no se les da el tratamiento adecuado, muchas veces son quemados con la consiguiente emisión de gases que son tóxicos y muy perjudiciales para el medio ambiente, personas y animales.

Imágenes – Daniel Lobo, Papa Pic