Las bujías son las encargadas de producir la chispa que permite la combustión de un motor gasolina. Si están en mal estado, funcionará de forma anómala y podrá generar vibraciones o incluso apagarse. Te enseñamos cómo comprobar las bujías para saber si son el problema de tu coche.
Además, aprovechando la inspección, podrás saber cuál es el estado general del motor de tu coche. Porque, según cómo se encuentren las bujías, se pueden detectar otras averías de diversa gravedad.
Comprobación de las bujías
Lo primero que debemos hacer es una comprobación visual del estado de las bujías. Es decir, que no tengan roturas en el aislante, desgaste excesivo de los electrodos o suciedad acumulada. Si tienen el aislante roto o un excesivo desgaste del electrodo, es necesario cambiarlas. Por el contrario, si tienen suciedad, es posible que baste con limpiarlas.
El siguiente paso es ir más allá de lo que se ve a simple vista. Aunque no estén rotas ni desgastadas, hay otra prueba importante que debe hacerse siempre: comprobar las bujías con un multímetro. Es una operación sencilla que solo requiere una herramienta barata. En el siguiente vídeo puedes ver como se usa y cómo se comprueban las bujías:
También te ponemos los pasos por escrito por si te resulta más cómodo. Lo primero es comprobar la Resistencia entre el terminal y el electrodo central, que en el caso de las bujías debe estar entre los 3.000 y los 7.500 Ohmios.
- Vamos a configurar el multímetro para ello: pon el multímetro en modo Resistencia, que viene indicado por la letra omega (Ω) y con la escala de medición inmediatamente superior a lo que esperamos. En el vídeo es 20.000 Ω, pero en otros puede ser 10.000 Ω, 40.000 Ω, etc.
- Enchufa los cables de prueba en los puertos correctos del multímetro: cable negro en el puerto COM y cable rojo en donde venga indicada la letra omega (Ω).
- Coloca las puntas de prueba: una en el terminal de la bujía y la otra en el electrodo central (la punta que está bajo el electrodo de masa que se curva sobre él)
- Si da un valor por encima o por debajo de los 3.000 Ω y los 7.500 Ω, la bujía está mal y hay que cambiarla.
La segunda comprobación es ver si sus partes están correctamente aisladas, de lo contrario no funcionaría:
- Para ello hay que configurar el multímetro en modo Continuidad, que viene indicado con el símbolo de diodo, que es una flecha en cuya punta hay una línea vertical. También viene indicado con una especie de altavoz.
- Enchufa los cables de prueba en los mismos puertos del multímetro que al medir Resistencia. Es decir, cable negro al puerto COM y cable rojo donde esté la letra omega (Ω).
- Coloca una punta de prueba en la rosca de la bujía y otra en el terminal. Si el multímetro no pita está bien aislada ahí.
- Ahora coloca una punta de prueba en el cuerpo central de la bujía y la otra en el terminal. Si está bien, tampoco pitará.
El estado de las bujías indica otras averías
Ahora que hemos inspeccionado y comprobado las bujías, podemos conocer el estado del motor analizando detenidamente el estado de las bujías:
- Si las bujías tienen un tono marrón claro en el aislante del electrodo central y los electrodos no tienen un desgaste excesivo, el motor funciona de forma correcta.
- Depósitos de carbonilla en las bujías: Puede ser debido a una mezcla rica o a una falta de compresión. En caso de que pase solo en una bujía, puede ser defecto del cable de alta tensión.
- Gran cantidad de depósitos de carbonilla humedecida en aceite: Significa que hay una falta de estanqueidad del motor, debido a un desgaste de los cilindros o segmentos.
- Tonalidad blanca y los electrodos con una erosión excesiva: Quiere decir que el motor ha estado trabajando a temperaturas superiores a las habituales. Esto puede ser debido a varias causas como, por ejemplo, exceso de avance de encendido o tomas de aire en el colector de admisión, entre otras.
- Bujía con los electrodos fundidos: puede ser que ese cilindro tenga autoencendido. En este caso, es necesario analizar a qué se debe, ya que si seguimos circulando con el coche podemos sufrir una avería grave.
- Aislantes de las bujías fracturados: Puede ser debido a detonación, que es necesario comprobar. Si también tienen golpes, puede ser a algún objeto que se encuentre en el cilindro.
- Depósitos abundantes fácilmente desprendibles: Puede ser por aditivos detergentes de los combustibles y también por usar una bujía de un grado térmico menor al apropiado.
¿Y qué pasa si las bujías están bien?
Si notamos que nuestro vehículo falla o tiene irregularidades en el funcionamiento del motor, uno de los motivos pueden ser las bujías. Así que no está de más comprobar su estado. Sin embargo, no son las únicas piezas que pueden fallar y dar síntomas parecidos (dificultades al arrancar, vibraciones y apagado del motor).
Si el síntoma son las vibraciones, los elementos más comunes que pueden fallar son los inyectores, las bobinas de encendido o los silentblocks. Los primeros, porque estén sucios o parcialmente obstruidos y no le llegue bien el combustible a uno o varios cilindros. Los segundos, porque estén rotos y no puedan amortiguar las vibraciones del motor.
Si el síntoma son las dificultades para arrancar, los problemas más habituales son la batería del coche o el alternador que no la carga, el motor de arranque o la bomba de combustible. Te recomendamos el artículo: No me arranca el coche: cómo saber qué falla y arreglarlo.
Para terminar, si lo que le pasa a tu coche es que se apaga por sí solo, los problemas puedes ser muchos. Por ejemplo, un sistema eléctrico con la batería o el alternador en muy mal estado, o que tenga cables sueltos o pelados que generen un exceso de resistencia al paso de la electricidad (Ω). También el sensor de posición del cigüeñal (sensor CKP), que envía una señal a la centralita para saber el giro del motor. Si no funciona, el motor se apagará. Otro ejemplo es, de nuevo, una bomba de combustible en mal estado u otros problemas en el sistema de inyección electrónica del coche.