Los objetivos de neutralidad de emisiones fijados por la Unión Europea han obligado a un cambio en el paradigma de la movilidad. El futuro está dictado por la tecnología eléctrica, y es ahora cuando todos los fabricantes se encuentran en ese decisivo momento de lanzar nuevos productos al mercado. Renault tiene una dilatada experiencia en el campo, aunque acaba de lanzar su producto más ambicioso, el Renault Megane E-TECH.
E-TECH es la denominación que la casa gala emplea para su tecnología electrificada, ya sea total o parcialmente. No es la primera vez que la hemos visto ya que tiempo atrás la hemos conocido en otros modelos como el Renault Clio o el Renault Captur. Tampoco podemos considerar al Megane E-TECH como el primer eléctrico de la casa, ya que ese honor siempre le corresponderá al Renault ZOE o al Renault Twizy, según como se quiera mirar.
Pero sí que podemos decir que el Mégane eléctrico es el primero de una nueva era. Queda claro que tomando prestado el nombre del Renault Mégane, estamos hablando de una variante 100% eléctrica del mismo. Presentado en septiembre de 2021, el Megane E-TECH es completamente diferente a su hermano térmico, luciendo un aspecto completamente diferente a casi cualquier otro producto de la casa.
Características técnicas Renault Megane E-TECH
Renault es pieza fundamental de una alianza firmada con Nissan y Mitsubishi. Este hecho provoca que las tres compañías compartan tecnologías y desarrollos. El nuevo eléctrico francés esconde bajo su carrocería crossover la plataforma CMF-EV del conglomerado automotriz. Se trata de una arquitectura especialmente diseñada para modelos eléctricos y que anteriormente ya la habíamos conocido en el Nissan Ariya, el primo hermano del Megane E-TECH.
Aunque sus formas den pie a pensar que hablamos de un coche muy grande, la realidad es que las medidas son bastantes contenidas. El diseño es el encargado de crear ese aspecto robusto y grande. Exteriormente alcanza los 4,2 metros de largo, 1,77 metros de ancho y 1,5 metros de alto, así que encaja perfectamente en el segmento B. Nada tiene que ver con su homólogo térmico, quedándose 15 centímetros por debajo en longitud. A esas cotas hay que añadir una distancia entre ejes de 2,68 metros.